Crònica humorística (o no) que podrien signar a les redaccions d'Intereconomia, Cuatro, Antena 3, La Razón, El Mundo, ABC, la COPE, Marca, AS o qualsevol altre mena d'escombraria informativa.
Titular 1: Habrá un finalista español en la final de la Liga de Campeones
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Titular 2: La final de Londres de la Liga de Campeones hablará español
El fútbol español está de moda. Los dos gigantes de nuestro fútbol patrio, el Real Madriz i el Barsa, se veran segurament las caras en las semifinales de la Liga de Campeones després de sentenciar en los partidos de ida. El Real Madriz, de manera brillante e indiscutible, se impuso a un aguerrido Tottenham (uno de les mehores clubes del mundo) por 4 golazos a cero demostrando que los jugadores blancos atesoran una gallardía y una raza sin paragón. Autoridad y señorío fueron sus señas de identidad.
Muy diferente ha estado el Barcelona. El partido ha empezado con una inconstitucional pancarta de Catalonia is not Spain cuando los españoles y los ex-comunistas escucahaban el himno de la Liga de Campeones. La UEFA debería tomar cartas en el asunto para evitar que cuatro desalmados separatista, que no representan el sentir mayoritário de esta región española, intenten desestabilizar el sentir de un club como el azulgrana. Sin brillantez, los de José Hucha han abusado de un Shakhtar (5-1) que, a todas luces, demuestra que la máxima competicón continental le viene grande. El Barcelona no ha sabido jugar y, buena prueba de ello, ha sido que los teóricos delanteros Villa y Messi han ocupado, en ocasiones, plaza de laterales. El Barcelona no está bien.
Villa es una sombra del jugador que golea com la Roja y Messi no aparece en los partidos importanes. Y es que han tenido que ser jugadores no habituales, ante la inoperáncia de los arietes, los que han tenido que marcar. Iniesta, Alves, Piqué, Keita y Xavi han destrozado la porteria de los que se parecen a los rusos-comunistas. Lamentable, que un jugador de la categoría de Iniesta haya forzado la amarilla (al no respetar la preceptiva distáncia en la falta que ha significado el gran gol de los de Lucescu) para no jugar la vuelta es una mácula en la brillante hoja de servicios del manchego. Situación que no habla muy bien del conjunto catalán que ha demostrado ser muy antideportivo.
En definitiva, todo parece indicar que los de Barcelona i el gran Real Madriz jugaran para que la bandera española, henchida de orgullo, ondee en el remozado estadio de Wembley el 28 de mayo próximo. Los de José Mourinho buscarán su décimo entorchado mientras que el Barcelona podria sumar otra final perdida. Eso sí, celebramos que los del Campo Nuevo jueguen con numerosos españoles en su equipo. Valdés, Pinto, Piqué, Puyol, Sergio, Xavi, Iniesta, Bojan, Pedro, Villa...
Juas, juas, juas....
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